La popular plataforma de videos cortos, TikTok, se enfrenta a una nueva ola de críticas en Estados Unidos. Trece estados han presentado demandas en su contra, acusando a la compañía de prácticas comerciales engañosas y de poner en riesgo la salud mental de los jóvenes.
Según las demandas, TikTok utiliza algoritmos diseñados para crear adicción, mostrando a los usuarios contenido que los mantiene enganchados durante horas. Además, se acusa a la plataforma de no tomar medidas suficientes para proteger a los menores de contenido inapropiado y de explotar sus datos personales.
Los fiscales generales de los estados demandantes argumentan que TikTok prioriza las ganancias por encima del bienestar de los jóvenes, utilizando tácticas manipuladoras para aumentar el tiempo que los usuarios pasan en la aplicación y, de esta manera, generar mayores ingresos publicitarios.
Por su parte, TikTok ha negado rotundamente las acusaciones, asegurando que cuenta con medidas de seguridad robustas para proteger a los menores de edad. Sin embargo, las demandas presentadas por los estados plantean serias dudas sobre las prácticas de la compañía y podrían tener importantes implicaciones legales y regulatorias para la plataforma.
Este nuevo frente legal se suma a las crecientes preocupaciones a nivel mundial sobre el impacto de las redes sociales en la salud mental de los jóvenes. Las demandas contra TikTok podrían marcar un precedente importante en la regulación de las plataformas digitales y obligar a las empresas a asumir una mayor responsabilidad por el contenido que se comparte en sus plataformas.