La economía de la eurozona creció un modesto 0,2% entre abril y junio de 2024, según datos de Eurostat, mientras que España destacó con un aumento del 0,8% en su PIB. Este crecimiento posiciona a España como una de las economías más dinámicas del bloque, solo superada por países como Polonia y Grecia. El presidente Pedro Sánchez celebró este logro, subrayando que el crecimiento de España fue cuatro veces superior al promedio de la eurozona.
A pesar del sólido crecimiento económico, España aún enfrenta desafíos en el empleo. La tasa de paro del país es la más alta de la región, situándose en un 11,3%, muy por encima del promedio de la eurozona del 6,4%. Sin embargo, los analistas destacan que la buena marcha del turismo y las exportaciones han sido clave para el desempeño económico de España.
El Banco Central Europeo (BCE) recortó los tipos de interés por segunda vez consecutiva, lo que refleja la preocupación por el enfriamiento de la economía europea. Aunque la eurozona muestra signos de recuperación, los expertos prevén que su crecimiento anual sea de solo un 0,7%, muy por debajo del 2,9% proyectado para España este año.
