Un grupo de 17 personas, familiares directos de Ovidio Guzmán, cruzó recientemente la frontera hacia Estados Unidos, generando sorpresa y descontento en el Gobierno de México. El hecho, que ocurrió sin previo aviso, ha dejado a las autoridades mexicanas con más preguntas que respuestas y ha generado especulaciones sobre posibles acuerdos entre el hijo de “El Chapo” y agencias estadounidenses.
Aunque no se ha confirmado oficialmente, se presume que este movimiento estaría relacionado con una colaboración por parte de Guzmán con el sistema judicial de Estados Unidos, tras su extradición en septiembre de 2023. Este cruce no habría sido una acción aislada, sino parte de un proceso más amplio en el que el capo podría estar proporcionando información a cambio de beneficios para su familia.
El ingreso de los familiares ocurrió sin que se informara de manera formal al Gobierno de México, lo que ha sido interpretado como una falta de coordinación y transparencia en un tema tan delicado como lo es el crimen organizado. Funcionarios mexicanos han expresado su inconformidad por no haber sido notificados previamente sobre un movimiento de tal magnitud.
Este hecho pone de relieve las complejidades diplomáticas que surgen cuando un narcotraficante de alto perfil como Ovidio Guzmán coopera con autoridades de otro país. Si bien la colaboración puede ser estratégica para obtener información sobre el Cártel de Sinaloa, también implica una serie de decisiones delicadas que afectan las relaciones bilaterales.
La ausencia de una comunicación oficial no solo genera tensiones diplomáticas, sino que también deja al descubierto la falta de control fronterizo en un momento donde el gobierno mexicano busca proyectar una imagen de firmeza frente al crimen organizado. La pregunta que ahora se plantea es: ¿Qué tipo de trato ha negociado Guzmán y hasta dónde llegarán sus implicaciones?
La Cancillería mexicana aún no ha emitido un posicionamiento claro, mientras que en círculos políticos se discute si esta omisión por parte de Estados Unidos constituye una falta de respeto a la soberanía nacional. El caso podría escalar a niveles más altos de discusión si se comprueba que hubo una negociación formal sin consultar al gobierno de México.
Este artículo ha sido elaborado a partir de información publicada en El País. Para leer la nota original, visita: https://elpais.com/mexico/2025-05-14/el-cruce-fronterizo-de-17-familiares-de-ovidio-guzman-agarra-a-contrapie-al-gobierno-de-mexico.html
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