La Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (Amespac) lanzó una seria advertencia este lunes: si Petróleos Mexicanos (Pemex) no paga sus deudas pendientes, una cantidad considerable de empresas proveedoras dejarán de operar a partir de julio. El llamado urgente subraya que la falta de liquidez ya está comprometiendo la viabilidad de muchas compañías del sector.
Según la Amespac, Pemex mantiene adeudos con sus agremiados por un total de 103,600 millones de pesos (alrededor de 5,114 millones de dólares), de los cuales más de 50,000 millones de pesos corresponden a trabajos ya certificados, algunos con más de un año de antigüedad. La situación ha provocado una crisis en el flujo de caja de muchas firmas, que han tenido que reducir sus operaciones de manera drástica.
“El escenario actual es sombrío. La mayoría de nuestras empresas asociadas no puede garantizar la continuidad de sus operaciones a partir de julio de este año”, advirtió la Amespac en un comunicado público. A pesar de diversas promesas del gobierno federal, la regularización de pagos no ha llegado en la magnitud esperada.
Al cierre del tercer trimestre, Pemex reportó cuentas por pagar a proveedores por 404,000 millones de pesos, apenas un 20% menos que los más de 500,000 millones registrados a finales de 2024. En perspectiva, la deuda ha crecido un 260% respecto a los niveles de 2018, lo que evidencia la profundidad del problema.
Cabe recordar que desde noviembre pasado, la presidenta Claudia Sheinbaum expresó su intención de saldar una parte significativa de esta deuda en el primer trimestre de 2025. Sin embargo, a la fecha, ese objetivo no se ha materializado, lo que ha agudizado la preocupación entre los contratistas del sector petrolero.
Ante esta situación crítica, la Amespac ha solicitado la creación urgente de una mesa de negociación con la Presidencia de la República, la Secretaría de Hacienda, la Secretaría de Energía y la dirección de Pemex. Esta mesa busca tres objetivos fundamentales:
- Reconocer y liberar la facturación correspondiente a los servicios prestados y certificados durante 2024.
- Garantizar la facturación regular y el pago puntual de los servicios realizados en 2025.
- Diseñar un programa estructurado para liquidar los adeudos históricos pendientes.
La continuidad operativa de un sector clave para la economía nacional pende de un hilo. Mientras tanto, miles de empleos y contratos se encuentran en riesgo si no se toman decisiones inmediatas para atender la crisis financiera que enfrentan los proveedores de Pemex.
Este artículo ha sido elaborado a partir de información publicada en EL ECONOMISTA. Para leer la nota original, visita: Proveedores de Pemex cesarían operaciones a partir de julio por falta de pago
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