Durante su conferencia matutina de este 1 de mayo, el presidente Andrés Manuel López Obrador anticipó la posibilidad de una crisis económica de carácter externo que podría afectar al país en el transcurso de 2025. Aunque el mandatario destacó que la economía nacional se encuentra actualmente estable y con finanzas públicas sanas, reconoció que México no está exento de los riesgos derivados del contexto internacional.
Entre los factores mencionados por López Obrador se encuentran las elecciones presidenciales en Estados Unidos, así como la creciente incertidumbre geopolítica y las tensiones comerciales que podrían generar inestabilidad en los mercados financieros globales. Señaló que, si bien el país ha actuado con responsabilidad en el manejo de su deuda y gasto público, las crisis externas suelen impactar a las economías emergentes como la mexicana.
“Estamos bien, con crecimiento, con recaudación histórica, con estabilidad del peso, pero hay señales en el entorno global que podrían implicar riesgos. No podemos descartar que haya una crisis económica mundial, derivada de decisiones políticas o financieras en otras partes del mundo”, expresó el presidente.
En este sentido, López Obrador subrayó la importancia de mantener la disciplina fiscal y continuar con los programas sociales y de inversión pública que han servido como pilares de su administración. También pidió a los sectores productivos y financieros del país mantenerse atentos a los indicadores globales.
La advertencia presidencial se suma a las proyecciones de diversos analistas que han señalado posibles tensiones económicas en 2025, especialmente si ocurren cambios en la política monetaria estadounidense o en el comercio internacional, tras las elecciones en ese país.
La Secretaría de Hacienda, por su parte, informó que se mantiene una estrecha vigilancia sobre los factores externos y que, de ser necesario, se activarán medidas contracíclicas para mitigar posibles impactos.