El crecimiento vertiginoso de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) ha suscitado una creciente preocupación en el mercado de las telecomunicaciones móviles. Empresas tradicionales como AT&T han urgido al Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) a revisar los criterios contables de las líneas telefónicas, ya que las cifras reportadas por los OMV podrían distorsionar la realidad del mercado móvil. Esta solicitud se realizó en el contexto de una consulta pública del IFT para la construcción de un acervo estadístico, destacando así la importancia de estos actores en el panorama actual. Según datos proporcionados por la consultora The Ciu, los OMV han alcanzado una participación del 10.2%, un incremento notable de 7.1 puntos porcentuales en los últimos cuatro años.
Este crecimiento se atribuye principalmente a la estrategia de ofrecer más por un precio menor, lo que ha atraído la atención de los usuarios en busca de alternativas más accesibles y atractivas. Bait, el OMV de Walmart, destaca como un actor clave en este panorama. Al cierre de 2023, Bait contaba con una base de 11.8 millones de usuarios, convirtiéndose en el líder indiscutible en la adquisición de nuevos clientes trimestre tras trimestre. Este éxito ha beneficiado a Altán Redes, proveedor de infraestructura, que ha experimentado un aumento en su base de usuarios gracias al negocio de Walmart.
La estrategia de Bait se basa en aprovechar la posición de liderazgo de Walmart como minorista y su amplia red de puntos de venta para ofrecer beneficios adicionales a sus clientes. La integración de Bait con las tiendas físicas de Walmart y Bodega Aurrera, así como la oferta de promociones exclusivas en eventos como el «Fin irresistible», ha contribuido a generar fidelidad entre los usuarios y atraer nuevos clientes. Sin embargo, surge la duda dentro de la industria sobre si todas las tarjetas SIM distribuidas por Walmart a través de Bait se activan realmente. A esta preocupación se suma la queja de empresas como América Móvil, que alega que los OMV, como Bait, están recurriendo a prácticas anticompetitivas en el mercado mediante tarifas difíciles de igualar para los operadores tradicionales, como Telcel.
AT&T ha identificado el problema a través del concepto de «línea activada», definida como líneas habilitadas para generar y/o recibir tráfico facturable. Los OMV utilizan este término al informar al regulador de las telecomunicaciones, pero no especifican si estas líneas están siendo utilizadas por los usuarios. AT&T propone incorporar el criterio de «línea celular activa» en la elaboración de las métricas del acervo estadístico del regulador, para obtener una visión más precisa del mercado móvil y de los OMV. Esta revisión se torna crucial para mantener la transparencia y la equidad en el mercado de las telecomunicaciones.
Con información de Expansión | Nota original