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Banxico analiza recortes para reactivar economía

Ante una economía debilitada, el Banco de México evalúa reducir más rápido su tasa de interés. La decisión dependerá de factores internos y del panorama global.

Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora del Banco de México (Banxico), declaró recientemente que la institución podría acelerar el ritmo de los recortes en la tasa de interés ante la persistente debilidad en la actividad económica del país. La intención detrás de esta posible medida es impulsar el crecimiento mediante condiciones financieras más flexibles.

Rodríguez Ceja explicó que, aunque se percibe una inflación moderada que permitiría relajar la política monetaria, Banxico actuará con precaución. El banco central buscará equilibrar su intervención para no agravar posibles desequilibrios, tomando en cuenta tanto los riesgos internos como las amenazas externas que podrían alterar la estabilidad financiera nacional.

Esta posibilidad de ajustes más agresivos en la tasa responde a señales de desaceleración en distintos sectores productivos. La confianza empresarial ha disminuido, y algunos indicadores de consumo también han mostrado signos de estancamiento. En este contexto, bajar el costo del dinero podría estimular el crédito y, por ende, la inversión y el gasto.

No obstante, la gobernadora enfatizó que cada movimiento de política monetaria será cuidadosamente evaluado. Las decisiones dependerán del análisis técnico y de datos económicos actualizados, especialmente en relación con la inflación, que sigue siendo un indicador central en la estrategia del banco central.

A nivel internacional, Banxico también está atento a los efectos de la política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos, así como a la evolución del conflicto comercial entre potencias, factores que pueden generar volatilidad cambiaria o afectar la demanda externa de productos mexicanos.

La posible aceleración en los recortes también abre el debate sobre los límites del estímulo monetario en una economía como la mexicana, en la que otros factores estructurales —como la informalidad y la baja productividad— siguen siendo retos importantes para el desarrollo sostenido.

Fuente original: Esta nota fue elaborada a partir de información publicada en El Economista. Puedes consultar la nota original aquí.

El contenido ha sido parafraseado con el propósito de informar. Todos los derechos del texto pertenecen a su autor original.

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