En Washington, D.C., el Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que la economía mundial está en camino de experimentar un suave aterrizaje, lo que permitirá continuar con el proceso de desinflación sin un impacto significativo en la actividad económica.
Se proyecta que la actividad económica global crecerá un 3.2% este año, una cifra similar a la prevista para el 2025, lo que significa tres años consecutivos de avance constante, según informó Pierre Olivier Gourinchas, Consejero Económico del FMI.
Este rendimiento se atribuye principalmente a la resistencia mostrada por la economía de Estados Unidos, señaló Petya Koeva, Subdirectora del Departamento de Investigación Económica del FMI, quien destacó que se espera un crecimiento del 2.7% este año, una mejora respecto al pronóstico anterior del 2.1% en enero.
El FMI ha revisado al alza su pronóstico de crecimiento para Estados Unidos a un 2.7% para este año, lo que refleja una de las correcciones más significativas durante las Reuniones de Primavera que se están llevando a cabo en Washington D.C. Esta revisión al alza se debe a la robustez observada en la economía estadounidense, impulsada por dos factores principales: la fuerza laboral en expansión, incluyendo empleados inmigrantes, y un aumento en la productividad que la sitúa por encima de otras economías.
Sin embargo, existe la preocupación de que este impulso pueda generar presiones inflacionarias, lo que podría retrasar el ajuste de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).
Se espera un crecimiento más modesto para otras economías avanzadas, con proyecciones del 0.8% para la Unión Europea, 0.5% para el Reino Unido y 1.5% para Canadá este año.
En cuanto a las economías emergentes, se prevé un crecimiento del 4.2% este año, duplicando la tasa promedio del 1.7% proyectada para las economías avanzadas. India destaca entre las economías emergentes con un crecimiento del 6.8%, seguida de China con un 4.6%, Rusia con un 3.2% y Brasil con un 2.2% en su Producto Interno Bruto (PIB).
En América Latina y el Caribe, se espera un crecimiento del 1.9%, inferior al esperado para México, que se sitúa en un 2.4%. Uruguay es señalado como el país con el crecimiento más dinámico de la región, alcanzando un 3.7%. A pesar de políticas monetarias restrictivas, la región muestra resiliencia, según Olivier Gourinchas del FMI.
Con información de El Economista | Nota original