El dólar estadounidense ha registrado uno de sus niveles más bajos en lo que va del año, en medio de un escenario internacional marcado por la creciente incertidumbre geopolítica. Los inversores reaccionan con cautela frente a las tensiones en Oriente Medio y a los frágiles acuerdos comerciales entre Estados Unidos y China.
Los recientes episodios de violencia y confrontación en varias regiones de Oriente Medio han generado una mayor aversión al riesgo en los mercados financieros, empujando a los inversionistas a buscar activos más seguros y reduciendo la demanda de dólares.
A esto se suman las crecientes dudas sobre la estabilidad de los acuerdos comerciales entre las dos mayores economías del mundo. Aunque en meses anteriores se habían registrado avances en los diálogos bilaterales, nuevos roces en temas estratégicos y de seguridad han reactivado los temores de un posible retroceso.
Como consecuencia, los mercados están experimentando lo que los analistas denominan un ambiente «risk-off», es decir, un escenario donde los participantes del mercado reducen su exposición a activos de mayor riesgo y optan por instrumentos más estables, afectando directamente al valor del dólar.
Este debilitamiento de la moneda estadounidense también ha impactado en otros activos globales, favoreciendo el fortalecimiento de monedas emergentes y el incremento en los precios de materias primas como el oro y el petróleo.
Los especialistas advierten que, de prolongarse este contexto de alta volatilidad geopolítica y comercial, el dólar podría mantener su tendencia a la baja durante las próximas semanas, a la espera de señales más claras de estabilidad internacional.
Este artículo ha sido elaborado a partir de información publicada en Reuters.
Para leer la nota original, visita: Dollar skims 2025 low, Middle East tensions fuel risk-off mood – Reuters.
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