El Banco de México (BdeM) confirmó en las minutas de su reunión de política monetaria del 26 de septiembre que, aunque la inflación de servicios sigue mostrando persistencia, continuará ajustando a la baja su tasa de interés. En esa reunión, el BdeM redujo la tasa de referencia de 10.75% a 10.50%.
A pesar de las divergencias entre los miembros de la junta sobre la política monetaria, todos coincidieron en que los riesgos inflacionarios siguen al alza, especialmente en el sector de servicios. Sin embargo, la mejora en la inflación general y subyacente permite prever nuevos recortes en la tasa antes de fin de año, comenzando con una posible reducción de 0.25 puntos el 14 de noviembre.
El Banco de México mantiene su compromiso de consolidar un entorno de inflación baja y estable, enfrentando los desafíos derivados de choques globales y la debilidad de la actividad económica.