Este lunes, las acciones de Boeing experimentaron una caída significativa, disminuyendo hasta un 8.6% en las operaciones previas a la apertura del mercado. Este descenso representa una pérdida de casi 13.000 millones de dólares en el valor bursátil de la compañía, generando preocupación entre los inversores acerca de los posibles daños a su negocio. Esta inquietud surge tras un incidente en el que parte del fuselaje de un Boeing 737 Max 9 estalló en pleno vuelo.
El vuelo afectado, operado por Alaska Airlines y que cubría la ruta de Portland, Oregón, a Ontario, California, se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia el viernes después de que parte de la pared de la aeronave se desprendiera, dejando un agujero considerable en el costado del avión.
Como respuesta a este suceso, la Administración Federal de Aviación (FAA) ordenó el sábado la suspensión de todos los vuelos del modelo Boeing 737 Max 9 hasta que se realicen inspecciones exhaustivas. Esta medida afecta a 171 aviones en todo el mundo, y aerolíneas en países como Turquía y Panamá han suspendido sus vuelos de este modelo.
Robert Clifford, abogado especialista en casos de aviación, expresó a CNN que este incidente tendrá un impacto negativo en la reputación de Boeing y que es probable que la empresa deba compensar a las aerolíneas por los ingresos perdidos debido a esta situación.
Este evento se suma a una serie de problemas que Boeing ha enfrentado en los últimos años. Desde la suspensión del 737 Max en marzo de 2019, tras dos accidentes fatales en los que murieron 346 personas, las pérdidas financieras de Boeing se han incrementado notablemente. La empresa ha reportado pérdidas anuales durante cuatro años consecutivos, desde 2019 hasta 2022, incluyendo una pérdida neta de 2.200 millones de dólares en los primeros nueve meses del año pasado. Se espera que los resultados financieros completos de Boeing para el año 2023 sean publicados a finales de enero.
A pesar de que el precio de las acciones de Boeing se ha recuperado desde los peores momentos de la pandemia, que sumieron a la industria aérea en una profunda crisis, aún se encuentra un 34% por debajo de su máximo alcanzado en febrero de 2020.
En contraste, las acciones de Airbus, el principal competidor europeo de Boeing, se cotizan actualmente por encima de su máximo previo a la pandemia. Las acciones de Airbus habían experimentado un incremento del 2.2% respecto a su cierre anterior en París, a las 6.19 a.m. (hora de Miami) de este lunes.
Con información de CNN Español | Nota original