La economía en Tapachula enfrenta una de sus peores caídas, con una disminución del 20% en las ventas en el centro de la ciudad, lo que ha obligado a muchos comerciantes a recortar personal para sostener sus operaciones. Uno de los factores clave es la inseguridad, que ha frenado la llegada de turistas y consumidores guatemaltecos, quienes solían ser el principal motor económico de la región.
Roberto Alejandro García Centeno, médico veterinario y empresario local, señaló que el crecimiento económico no se ha manifestado en la zona; al contrario, la mayoría de los negocios reportan una caída en ventas de entre el 20% y el 40%. Aunque el Buen Fin representa una oportunidad de recuperación, los resultados han sido limitados, en especial para aquellos negocios que dependen del turismo guatemalteco.
La pandemia de COVID-19 impactó duramente en Tapachula y, según los comerciantes, la economía no se ha recuperado desde entonces. A pesar de que el cambio de quetzal es favorable, con una tasa de 2.50 pesos, los turistas de Guatemala han reducido sus visitas debido a los problemas de inseguridad en la región. Los empresarios locales han solicitado mayor vigilancia en las carreteras para mejorar la seguridad, lo que permitiría reactivar el flujo de turistas y, con ello, el comercio en Tapachula.