La significativa reducción del 43% en los ingresos debido a las exenciones fiscales otorgadas a Petróleos Mexicanos (Pemex) tiene un impacto negativo en las finanzas de los estados y municipios de México, según advierte Moody’s. Las estimaciones apuntan a que los estímulos fiscales a Pemex en 2023 han resultado en una disminución de casi 50 mil millones de pesos en las participaciones federales a estas entidades locales. Estas participaciones, que son transferencias de ingresos petroleros sin un destino específico, constituyen la principal fuente de ingresos operativos para la mayoría de los estados y municipios. La caída en los ingresos petroleros ha sido el principal factor detrás de la brecha entre las participaciones presupuestadas y las efectivamente recibidas este año. Además, las recientes exenciones fiscales a Pemex y la aprobación de reducir la tasa del Derecho de Utilidad Compartida de 40% a 30% en 2024 agudizarán esta situación, limitando aún más los ingresos petroleros disponibles para los gobiernos locales. La proyección de ingresos petroleros para 2024 es 43% inferior a la estimada para 2023, lo que subraya la tensión continua en las finanzas públicas regionales y municipales.
Con información de Latinus | Nota original
