En un entorno económico marcado por la incertidumbre, la correcta administración de las finanzas personales se ha convertido en un factor clave para garantizar estabilidad y seguridad patrimonial. Sin embargo, muchas personas postergan decisiones estratégicas sobre su dinero debido a la falta de conocimiento, la urgencia del día a día y la ausencia de herramientas adecuadas.
Especialistas en finanzas enfatizan que una organización efectiva es el primer paso hacia la salud financiera. En este sentido, la tecnología ha facilitado la tarea, con aplicaciones que incorporan inteligencia artificial para optimizar la gestión del dinero. Un ejemplo es PocketSmith, que usa IA para proporcionar asesoramiento financiero en tiempo real, ayudando a los usuarios a tomar decisiones informadas sobre sus gastos e inversiones.
Otra alternativa tecnológica es Dinta, una app integrada en WhatsApp que permite a los usuarios registrar sus compras diarias con solo enviar un mensaje. La herramienta clasifica automáticamente los gastos, brindando un panorama claro del flujo financiero y facilitando la toma de decisiones para evitar desequilibrios presupuestarios.
Más allá de la tecnología, los expertos recomiendan cinco pilares fundamentales para mejorar la estabilidad económica personal: control de deudas, construcción de un fondo de emergencia, inversión a largo plazo, planificación para el retiro y una estrategia financiera bien estructurada. En cuanto a las deudas, es esencial priorizar la liquidación de aquellas con tasas de interés elevadas, como tarjetas de crédito y préstamos personales, mientras que créditos de menor costo, como hipotecas, pueden manejarse de manera estratégica sin afectar el presupuesto mensual.
El ahorro de emergencia es otro aspecto crucial para evitar recurrir al endeudamiento en caso de imprevistos. Se recomienda contar con un fondo equivalente a entre tres meses y un año de gastos, preferentemente invertido en instrumentos de alta liquidez. Automatizar el ahorro, estableciendo depósitos programados al recibir ingresos, ayuda a alcanzar este objetivo de manera eficiente.
Una vez controladas las deudas y asegurado un fondo de emergencia, el siguiente paso es la inversión. Las opciones varían según el perfil de riesgo, pero incluyen fondos diversificados, acciones, bonos y ETFs. A pesar de que la educación financiera ha mejorado en los últimos años, muchos aún evitan invertir debido a la falta de ahorros iniciales o la desconfianza en los mercados.
Por otro lado, la construcción de un patrimonio sólido no debe verse solo como una meta a largo plazo, sino como una estrategia para garantizar la independencia financiera. Planes de pensión privados, inversiones en activos de crecimiento y el aprovechamiento del interés compuesto pueden hacer la diferencia en la estabilidad económica futura.
Finalmente, la planificación es la clave de todo el proceso. Los especialistas insisten en que no se trata de alcanzar un estilo de vida idealizado, sino de diseñar una estrategia que permita a cada persona cumplir sus objetivos sin que los problemas financieros se conviertan en un obstáculo. Contar con un plan estructurado proporciona la tranquilidad de saber que se está preparado para cualquier eventualidad y permite tomar decisiones con mayor seguridad y confianza.
Este artículo ha sido elaborado a partir de información publicada en [infobae]. Para leer la nota original, visita: Las 5 claves para planificar las finanzas y evitar riesgos económicos según una experta Argentina – Infobae
El contenido ha sido parafraseado con el propósito de informar. Todos los derechos del texto original pertenecen a [infobae] y a su autor.