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Sequía, Pemex y aranceles, las amenazas para la economía mexicana este año: IMEF

El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) ha señalado tres principales amenazas que podrían impactar la economía mexicana durante este año: la delicada situación financiera de Pemex, los efectos prolongados de la sequía a nivel nacional, y el riesgo de imposición de aranceles por parte de Estados Unidos al acero y al aluminio mexicanos. A pesar de que la economía mexicana ha mostrado un rendimiento positivo recientemente, estos factores podrían desempeñar un papel crucial en su futuro cercano.

La condición financiera de Pemex es particularmente preocupante. La empresa, que es una de las petroleras más endeudadas a nivel mundial, no ha mostrado una mejora sustancial en su generación de efectivo operativo, a pesar de los altos precios del petróleo y el significativo apoyo financiero del gobierno federal. Este apoyo ha alcanzado los 1.8 billones de pesos, sin lograr una reducción notable en la deuda de la empresa, la cual se mantiene alrededor de los 105,000 millones de dólares. Además, Pemex reportó al cierre del año pasado un capital negativo de 92,000 millones de dólares y adeudos a proveedores por 22,000 millones de dólares.

En cuanto a la sequía, ésta ha afectado las cosechas en varias regiones del país, lo que podría incrementar los precios de productos agrícolas. Aunque México puede recurrir a las importaciones para cubrir los déficits, el precio global de estos productos también podría aumentar debido a que otros países enfrentan situaciones similares.

Por último, la potencial imposición de aranceles al acero y al aluminio por parte de Estados Unidos podría tener consecuencias no solo en estas industrias, sino también en otras áreas que dependen de estos materiales, como el sector automotriz y de manufactura de enseres.

A pesar de estas preocupaciones, el IMEF mantiene su proyección de crecimiento para México en un 2.4% para este año. Resaltan la importancia del nearshoring como una oportunidad para fortalecer la economía, aunque advierten que se requiere de un proyecto ambicioso de desarrollo de infraestructura, especialmente en los sectores de energía eléctrica y suministro de agua, para aprovechar completamente esta oportunidad.

Con información de El Economista | Nota original

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