El FMI ha revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento para América Latina en 2024, advirtiendo que la región enfrentará una desaceleración económica debido a diversos factores externos e internos. Según el organismo, el crecimiento será de aproximadamente 2.3%, por debajo de las estimaciones previas, debido a la persistencia de altas tasas de interés en economías clave como Estados Unidos y Europa.
Además, la inflación sigue siendo un desafío en países como Argentina y Colombia, donde los precios al consumidor han aumentado de manera significativa. En contraste, economías como Brasil y México han mostrado una mayor estabilidad en sus indicadores económicos, aunque siguen siendo vulnerables a factores externos.
El FMI también ha resaltado que la incertidumbre política en países como Ecuador, Perú y Argentina podría generar un clima de inversión menos favorable, afectando la llegada de capitales extranjeros y limitando el crecimiento del empleo formal.
A pesar del panorama desafiante, el organismo sugiere que una adecuada implementación de políticas fiscales y monetarias podría ayudar a mitigar los impactos negativos. Recomienda a los gobiernos mantener la disciplina fiscal y fortalecer las inversiones en infraestructura y tecnología para estimular el crecimiento sostenible en la región.
Este artículo ha sido elaborado a partir de información publicada en Bloomberg. Para leer la nota original, visita: Bloomberg.
El contenido ha sido parafraseado con el propósito de informar. Todos los derechos del texto original pertenecen a Bloomberg y a su autor.