Visa obtendrá los derechos de pago exclusivos durante los Juegos Olímpicos de París 2024, lo que le proporcionará una visibilidad sin precedentes entre los millones de espectadores. Sin embargo, esta exclusividad conlleva riesgos para su imagen.
Para realizar compras de comidas, bebidas o souvenirs en las sedes olímpicas, la forma más sencilla será mediante una tarjeta de pago Visa.
Para los titulares de tarjetas de sus competidores Mastercard o American Express, Visa propone tres soluciones.
Los espectadores podrán generar una «tarjeta de pago Visa virtual» en sus teléfonos móviles a partir de junio, donde podrán cargar el dinero deseado. Además, habrá tarjetas físicas disponibles en los recintos olímpicos, que se podrán recargar con hasta 150 euros y serán gratuitas.
La tercera opción será utilizar efectivo, ya que en Francia es obligatorio ofrecer esta alternativa junto con los diferentes sistemas de pago.
Las tarjetas están diseñadas para convertirse en objetos de colección y podrán utilizarse hasta finales de 2024 en todos los establecimientos que acepten Visa en Francia.
Sin embargo, esta iniciativa ha generado algunas reacciones negativas en las redes sociales.
Nicolas Macé, director del programa París 2024 en Visa, señaló que su objetivo es acompañar el evento de la mejor manera posible y asegurarse de que la experiencia de los Juegos Olímpicos sea lo más agradable posible. Reconoció los posibles riesgos para la imagen de Visa y afirmó que proporcionarán soluciones inmediatas, fluidas y gratuitas, así como asistencia para aquellos que no posean una tarjeta Visa y necesiten alternativas.
Con información de El Economista | Nota original