Kazuo Ueda, gobernador del Banco de Japón (BOJ, por su sigla en inglés) dijo que el ritmo de la actividad económica de China es una decepción que podría enturbiar las perspectivas económicas de Japón, de acuerdo con el texto de su discurso pronunciado en el Simposio de Jackson Hole celebrado el fin de semana.
Los datos de julio de China, como las ventas al por menor, la inversión empresarial y la producción industrial, se situaron “en el lado débil”, aseguró Ueda, según el texto publicado ayer en la página web del BOJ.
“El problema subyacente parece ser el ajuste en el sector inmobiliario y su contagio al resto de la economía”, mencionó Ueda sobre China, y añadió que el golpe que la debilidad china dio a Japón se ha visto compensado, en cierta medida, por la relativa fortaleza de la economía estadounidense.
Ueda también señaló que los flujos comerciales y de inversión extranjera sugieren que las empresas japonesas diversifican su producción desde China hacia el resto de Asia y Estados Unidos, en parte como respuesta a los riesgos geopolíticos.
“Los efectos a largo plazo de los factores geopolíticos sobre la economía japonesa son, como era de esperar, muy inciertos”, afirmó Ueda, quien agregó que “la guerra de ojo por ojo” en el sector de los semiconductores entre las principales economías avanzadas y China constituye un riesgo.
“A los bancos centrales les resultará difícil tener en cuenta estas fuerzas a la hora de tomar decisiones políticas”, aseguró.
Ueda pronunció este discurso durante una sesión celebrada el sábado en el Simposio de Jackson Hole, en Wyoming.
Con información de: El economista. || Nota original aquí.