Según datos proporcionados por el gobierno federal, las 10 Afores en México han transferido al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) menos del 1% de los recursos no reclamados por los trabajadores, a pesar de la obligación legal de hacerlo.
En total, estas Afores han devuelto al IMSS un total de 368.6 millones de pesos, mientras aún resguardan 40,130 millones de pesos en recursos no reclamados.
Por ejemplo, la Afore XXI Banorte tiene 76,140 cuentas no reclamadas por un monto total de 9,360 millones de pesos, pero solo ha devuelto al IMSS 284.7 millones de pesos, lo que representa el 3.04% del total.
En contraste, la Afore que más recursos ha devuelto es PensionISSSTE, con solo 35 cuentas no reclamadas por 915 millones de pesos, de los cuales ha entregado 180.7 millones, aproximadamente el 20% del total.
En 2020, se reformaron las leyes del IMSS, Infonavit e ISSSTE para establecer que las Afores debían transferir los ahorros en cuentas no reclamadas al gobierno federal después de 10 años de su exigibilidad. Tanto el IMSS como el ISSSTE tienen la responsabilidad de mantener una reserva financiera suficiente para garantizar que los dueños de esos recursos, o sus beneficiarios, puedan reclamarlos incluso después de 10 años.
La reforma propuesta para crear el Fondo de Pensiones para el Bienestar busca modificar estas leyes para que las Afores transfieran los recursos no reclamados cuando el titular de la cuenta cumpla 70 años, en lugar de esperar 10 años después de la exigibilidad de los ahorros. Además, se plantea que estos recursos se destinen al Fondo de Pensiones para el Bienestar en lugar de al IMSS, Infonavit o ISSSTE, que a su vez formará una reserva financiera suficiente para devolver los recursos a quienes los reclamen.
El Presidente ha reiterado que esta reforma no constituye una expropiación ni un robo de los recursos de los trabajadores.
Con información de El Economista | Nota original