El Ministerio de Vivienda de China anunció que se intensificarán los esfuerzos para apoyar al debilitado sector inmobiliario del país con la oferta de préstamos de rescate adicionales. Esta medida se toma en un intento por reactivar el crecimiento económico, después de que el sector, que alguna vez fue el motor de la economía china, enfrentara graves desafíos financieros.
La industria inmobiliaria china ha experimentado una ralentización significativa debido a las restricciones gubernamentales sobre el endeudamiento excesivo impuestas en 2020. Como resultado, numerosos promotores inmobiliarios han luchado con deudas abrumadoras y una demanda decreciente, lo que ha generado un impacto negativo en la segunda economía más grande del mundo.
El ministerio declaró que los gobiernos locales propondrán listas de proyectos inmobiliarios que serán elegibles para recibir apoyo financiero. Se espera que los primeros fondos estén disponibles antes de finales de mes. Además, se formará una entidad supervisora a nivel nacional para monitorear estos préstamos.
Esta acción se suma a las varias rondas de fondos de rescate ya emitidas para el sector, con bancos que proporcionaron cerca de 10 billones de yuanes en préstamos el año pasado. Con la economía china creciendo a uno de sus ritmos más lentos en décadas durante 2023, las autoridades también prometieron nuevas medidas para estimular la economía, incluyendo una reducción en la cantidad de efectivo que los bancos deben mantener en reserva.
El sector inmobiliario, que durante décadas representó aproximadamente una cuarta parte de la economía china, ha sido acosado por la crisis de deuda de algunos de sus principales promotores. La intervención gubernamental busca estabilizar esta industria clave y, con ella, impulsar el crecimiento económico general del país.
Con información de El Economista | Nota original