La actividad manufacturera en Estados Unidos experimentó una contracción en enero, aunque la disminución fue menor a la anticipada, mostrando señales de una resiliente pero desacelerada industria. Según el Instituto de Gestión de Suministros (ISM), el índice de gestores de compras manufacturero ascendió a 49.1 puntos en enero desde los 47.1 puntos registrados en diciembre, lo que sugiere una contracción más suave de lo esperado en el sector. Esta mejora, aunque ligera, indica una estabilización en la demanda y producción, contrastando con las expectativas de los analistas que preveían un índice estancado en 47.2 puntos.
Mientras tanto, en la zona euro, la situación manufacturera también mostró signos de desaceleración menos pronunciada, con el índice de gestores de compras manufacturero alcanzando los 46.6 puntos en enero, un incremento desde los 44.4 puntos de diciembre, según S&P Global. Aunque la actividad sigue en contracción, el optimismo en el sector ha crecido, alcanzando su punto más alto desde abril, lo que podría indicar una recuperación gradual en los próximos meses. Estos desarrollos sugieren un panorama cautelosamente optimista para la manufactura tanto en Estados Unidos como en la zona euro, pese a los desafíos económicos globales continuos.
Con información de El Economista | Nota original