La situación entre Estados Unidos y México con respecto a la importación de acero y aluminio de China ha sido un tema central en la política comercial reciente. En respuesta a las preocupaciones expresadas por el presidente Joe Biden sobre el transbordo de acero chino a través de México hacia Estados Unidos, México ha implementado aranceles a una amplia gama de productos. Esto se alinea con la intensificación de esfuerzos de la administración Biden para combatir prácticas que consideran evasivas en las importaciones de acero y aluminio, especialmente desde China.
Estas medidas reflejan una mayor cooperación bilateral para abordar temas de comercio internacional y prácticas que ambos gobiernos consideran injustas o perjudiciales para sus industrias nacionales. La presión sobre México para actuar contra las importaciones de acero y aluminio de terceros países muestra la complejidad de las relaciones comerciales y la importancia de la transparencia y la acción coordinada en el cumplimiento de las normativas internacionales y bilaterales.
Con información de El Economista | Nota original