Uber ha sido sancionada con una multa millonaria por las autoridades de Países Bajos debido a la transferencia no autorizada de datos de conductores a Estados Unidos. La compañía fue acusada de violar las estrictas normativas europeas de privacidad, que exigen protección rigurosa para la información personal.
El regulador holandés determinó que Uber no cumplió con las reglas del Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), lo que resultó en esta penalización significativa. La empresa ha indicado que cooperará plenamente con las autoridades y está revisando sus políticas de datos para evitar futuras infracciones.