La jornada bursátil en Wall Street se ha caracterizado por una marcada volatilidad, con los principales índices moviéndose en direcciones opuestas. Los inversores están sopesando diversos factores, entre los que destacan la publicación del índice de precios al consumidor de Estados Unidos y el acalorado debate entre los principales candidatos presidenciales.
El dato de inflación de agosto, que se situó por debajo de las expectativas del mercado, ha aliviado las presiones sobre la Reserva Federal. Este resultado sugiere que la inflación podría estar moderándose, lo que podría llevar al banco central a adoptar una postura monetaria menos restrictiva. Sin embargo, las dudas persisten en cuanto a la magnitud y el ritmo de los futuros recortes de tasas de interés.
Por otro lado, el debate presidencial entre Donald Trump y Kamala Harris ha generado una fuerte reacción en los mercados. Las acciones de la compañía de medios de Trump experimentaron una caída significativa tras el enfrentamiento, lo que refleja la incertidumbre que rodea al futuro político del exmandatario. Los analistas han destacado la mayor claridad y consistencia en las propuestas de Harris, lo que podría haber favorecido a la candidata demócrata en la opinión de los inversores.
En términos sectoriales, el sector tecnológico y de comunicaciones han mostrado un desempeño positivo, mientras que el sector energético ha registrado las mayores pérdidas. Dentro del Dow Jones, las acciones de UnitedHealth y Travelers han sido las más afectadas.
En resumen, Wall Street continúa mostrando una alta sensibilidad a los eventos tanto económicos como políticos. La publicación de datos macroeconómicos y los resultados electorales seguirán siendo factores clave que determinarán el rumbo de los mercados en las próximas semanas.